Consuma productos lácteos semidescremados o descremados: leche, queso light.

Evite alimentos grasosos como fritos, mantequilla, manteca, mayonesa, crema de leche, vísceras y yema de huevo.

Prefiera el consumo de carnes blancas, al horno o a la plancha, la pechuga de pollo sin piel y las carnes rojas sin grasa visible, y preferiblemente asadas o cocidas.

Limitar el número de porciones de harina a máximo 5 al día: 1 al desayuno, 2 al almuerzo y 2 pequeñas a la comida.

Utilice aceite vegetal en sus preparaciones; aceite girasol, oliva, canola y maíz.

Aumente el consumo de fibra ingiriendo 5 porciones entre frutas y verduras al día.

Si se encuentra en sobrepeso u obesidad, consuma 1 sola harina por tiempo de comida.

Disminuya el sedentarismo: 

1. Acostúmbrese a caminar al menos 30 minutos cada día.

2. Utilice las escaleras en lugar del ascensor.

3. Bájese unas cuadras antes de su casa para que ejercite su cuerpo.

¡Recuerde!

El colesterol elevado junto con el tabaquismo, presión arterial elevada, diabetes y antecedentes de infarto en la familia, son factores de riesgo para la enfermedad cardiovascular.

Evite los alimentos con alto contenido de colesterol


Yema de huevo: Puede consumir 1 huevo
entero 1 vez por semana.

Sesos de res: No lo consuma.

Tocino y tocineta: No lo consuma.

Vísceras: Hígado y pajarilla, puede consumirlo 1 vez al mes (NO FRITO).

Camarones: No lo consuma.

Langostinos: No lo consuma.

Rellena y pepitoria:  Puede consumirlo 1 vez al mes.

Mayonesa: Puede consumirlo 1 vez al mes.

Aceite de coco: No lo consuma.

Leche entera: Prefiera la leche descremada o baja en grasa.

Queso Entero: Prefiera el queso descremado o bajo en grasa.

Aceite de Palma: Prefiera el aceite de girasol, soya o canola.