Son un conjunto de elementos estructurales, procesos, instrumentos y metodologías basadas en evidencias científicamente comprobadas que buscan minimizar el riesgo de sufrir un evento adverso en el proceso de atención o mitigar sus consecuencias.

Principios orientadores

  1. Enfoque de atención centrada en el usuario
  2. Cultura de Seguridad.
  3. Integración con el sistema obligatorio de Garantía de Calidad en Salud.
  4. Multicausalidad.
  5. Alianza con el paciente y su familia.
  6. Alianza con el profesional de Salud

Estrategias de seguridad para los usuarios

  1. Identificar correctamente al usuario.
  2. Mejorar la comunicación efectiva.
  3. Mejorar la seguridad de los medicamente de alto riesgo.
  4. Cirugía en el lugar correcto al usuario correcto.
  5. Reducir el riesgo de infecciones asociadas con la atención en la salud.
  6. Minimizar el riesgo de daño al usuario por caídas.
  7. Prevenir las úlceras por presión.
  8. Seguridad transfusional.

Identificación correcta

Se realizará la identificación del usuario a partir de, por lo menos, dos datos diferenciales que se encuentran establecidos para la institución: nombre completo y número de identificación.

Con este proceso se pretende asegurar mecanismos y acciones de búsqueda que permitan localizar a los usuarios que no se encuentren en el servicio de atención inicialmente indicado.

Se colocará en el antebrazo del usuario una manilla de identificación de acuerdo con el código de colores establecido para la identificación del riesgo así:

  • Blanca: contiene los datos de identificación del usuario.
  • Verde: identifica a usuarios con riesgo de lesiones por presión.
  • Verde con muñecos: identifica a los menores de edad que ingresan como acompañantes de usuarios.
  • Roja: identifica a usuarios que sufren de alergias.
  • Amarilla: usuarios con alteración mental.
  • Morada: identifica a usuarios anti coagulados.
  • Naranja: identifica a usuarios con riesgo de caída.