
La fiebre amarilla es una enfermedad viral grave transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. En su forma leve, provoca fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, náuseas y vómito. Sin embargo, entre un 15 % y 20 % de los casos avanzan a una fase tóxica que puede generar fallo multiorgánico, sangrados internos y coloración amarilla en piel y ojos. Según la Organización Mundial de la Salud, la mitad de quienes llegan a esta fase mueren en un plazo de siete a diez días (OMS).
Vacunación: gratuita y sin barreras
“La vacuna contra la fiebre amarilla es gratuita, está disponible en todo el país y no tiene barreras de acceso. Se aplica sin importar el estado de afiliación al sistema de salud, la nacionalidad o el estatus migratorio”, explicó Jessica Liliana Abril, jefe de Enfermería del programa de infecciones de Los Comuneros HUB
Una sola dosis basta para estar protegido de por vida. Si una persona no cuenta con un documento que certifique la vacunación, debe aplicársela nuevamente. “La inmunidad comienza a desarrollarse 10 días después de la aplicación y alcanza el 99 % a los 30 días”, añadió.
¿Quiénes deben vacunarse?
La vacuna hace parte del esquema nacional desde 2003 para niños y niñas entre los 12 y 23 meses. También está indicada para personas entre 1 y 59 años que vivan, transiten o viajen a zonas de riesgo (regiones selváticas, rurales, cálidas y húmedas del país, como las del Amazonas, la Orinoquía, el Chocó biogeográfico y otras áreas tropicales donde hay presencia del mosquito transmisor).
Está contraindicada en bebés menores de seis meses, personas inmunocomprometidas, pacientes con enfermedades del timo, mujeres embarazadas y personas con VIH sin control médico.
Signos de alerta y medidas de protección
Uno de los primeros signos de alerta son: fiebre menor a siete días, vómito, diarrea, dolor abdominal persistente, sangrados leves o signos de deshidratación pueden ser síntomas de fiebre amarilla. Si la persona ha estado en zonas de riesgo o realiza actividades como agricultura, pesca o labores forestales, debe acudir de inmediato al médico.
“El llamado principal es a vacunarse. Es una vacuna segura, gratuita y altamente efectiva”, recalcó el médico internista Octavio Ayala, quien también recordó que eliminar criaderos de mosquitos es clave para frenar el contagio.
Las autoridades de salud insisten en que la vacunación oportuna y la prevención son las herramientas más efectivas para evitar nuevos contagios. La responsabilidad también está en manos de la ciudadanía. ¡Cuidémonos!